Dormir es una necesidad fisiológica muy importante para nuestra salud. Cuando dormimos descansamos y nuestro cuerpo recupera la energía. Un buen descanso y sueño es fundamental para que los niños estén dispuestos a aprender, disfrutar y desarrollar actividades físicas al día siguiente.
El niño no nace “preparado” para dormir bien todas las noches. Al igual que enseñamos a los hijos otras conductas que les ayudan a conseguir un grado de autonomía progresivo, debemos enseñarles a dormir solos. Dormir bien suele ser el resultado de tener buenos hábitos de sueño y la enseñanza de estos hábitos a los hijos es responsabilidad de sus padres. La obligación como madres/padres no es la de dormir al niño, sino la de facilitarle que sea él quien concilie el sueño y aprenda a dormirse solo.
Y recordad:
UN BEBÉ BIEN CUIDADO NO ES EL QUE MÁS DUERME
Vídeo "Ventana abierta a la familia" Junta de Andalucía
Descanso. Sueño. Estrategia Promoción de la Salud y Prevención en el SNS. Mº de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
Guía de Práctica Clínica sobre Trastornos del Sueño en la Infancia y Adolescencia en Atención Primaria. Mº Ciencia e Innovación. 2011. ISBN: 84-451-3413-2. Disponible en: http://www.guiasalud.es/GPC/GPC_489_Trastorno_sue%C3%B1o_infadol_Lain_Entr_compl.pdf
Grupo de trabajo de la Guía de Práctica Clínica sobre trastornos del Sueño en la Infancia y adolescencia en atención Primaria. Guía de Práctica Clínica sobre trastornos del Sueño en la Infancia y adolescencia en atención Primaria. Plan de Calidad para el Sistema Nacional de Salud del Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad. Unidad de Evaluación de tecnologías Sanitarias de la agencia Laín Entralgo; 2011. Guías de Práctica Clínica en el SNS: uEtS N.º 2009/8
Pin Arboledas G, Morell Salort M, Mompo Marabotto L. Higiene del sueño y melatonina. En AEPap ed. Curso de Actualización Pediatría 2014. Madrid: Exlibris Ediciones; 2014. p. 133-143