Terrores nocturnos y pesadillas

Mar 13 de Mar de 2018

Los terrores nocturnos y pesadillas pueden aparecer a lo largo de la vida del niño. Conocer lo que son cada uno de ellos, ayudará a entenderlos.

¿Qué son los terrores nocturnos?

Los terrores nocturnos son episodios repentinos de terror durante el sueño que duran unos minutos y finalizan de forma espontánea. Aunque el niño tenga abiertos los ojos, el niño no ve ni oye lo que está ocurriendo, ya que, en realidad, permanece dormido. Tampoco responde a estímulos externos ni suele recordar lo sucedido.

Es mejor no despertar ni interactuar con el niño y esperar a que se le pase solo, cuidando que no se haga daño. Al día siguiente es conveniente no hablar sobre el tema porque puede producirle miedo a quedarse dormido.

La mayoría de las veces desaparecen cuando el niño crece. En pocas ocasiones permanece con los años, produciendo cansancio y somnolencia durante el día. En estos casos es aconsejable recibir ayuda profesional.

¿Qué son las pesadillas?

Las pesadillas son sueños que producen temor y ansiedad. En este caso, los niños sí se despiertan asustados por el sueño recordando todo lo que han soñado.

Es bueno tranquilizar al niño, explicándole que es sólo un sueño. Se puede quedar una luz pequeña encendida.

En ese momento no es conveniente hablar sobre el tema de la pesadilla, dejándolo para el día siguiente, incluso que lo exprese con dibujos, y que imagine un final feliz.

 ¿Cómo prevenirlas?

Existen unas medidas preventivas para evitar episodios de terrores nocturnos y pesadillas en el sueño:

  • Evitar ver películas o programas que le produzcan inquietud o que oigan historias de terror antes de acostarse, así como juegos que supongan una excitación excesiva para el niño.
  • Seguir una rutina antes de acostarse con actividades relajantes.
  • No tener mucha iluminación en la habitación.
  • No es conveniente suprimir la siesta de un niño a partir del año con la creencia de que así se dormirá antes y mejor por la noche.
  • Dormir durante un tiempo razonable, suficiente para que esté descansado y rinda el día siguiente.
  • El sueño tiene que ser una actividad placentera y evitar asociar la cuna o la cama con el castigo.

 

Bibliografía

Gonzalvo Rodríguez, C. et. al. Pesadillas y terrores nocturnos. 2014. Disponible en: https://enfamilia.aeped.es/temas-salud/pesadillas-terrores-nocturnos

Pin Arboledas G., et. al. Higiene del sueño y melatonina. Disponible en: cursosaepap.exlibrisediciones.com/files/49-201.../Higiene%20del%20sueño.pdf

Curso de Actualización Pediatría 2014. AEPap. Exlibris Ediciones; 2014. p. 133-43

Guía de Práctica Clínica sobre Trastornos del Sueño en la Infancia y Adolescencia en Atención Primaria. Mº de Ciencia e Innovación. 2011. ISBN: 84-451-3413-2

¿Qué busca?

Últimas publicaciones y recursos