¿Por qué el juego es importante para el niño?

Las razones por las que todos los niños deben jugar como parte de su desarrollo y de su vida son:

• Primero, porque les gusta y les hace sentir bien y felices, mejorando así su autoestima.

• Les hace descubrir el mundo que les rodea.

• Segundo, porque realizan ejercicio físico les aporta:
  • Salud a nivel del sistema muscular, óseo, cardíaco, pulmonar...
  • Mantenimiento de una buena forma física.
  • Regular la postura, el equilibrio y la coordinación del cuerpo.
  • Les ayuda a conciliar el sueño.

• También les estimula el desarrollo de:
  • La coordinación psicomotriz.
  • La motricidad gruesa y fina.
  • La afectividad, al expresar emociones como alegría, tristeza, sorpresa, etc.
  • La empatía.
  • La imaginación, incrementando su creatividad.

• Se relacionan con los demás niños:
  • Creando tolerancia, ya que el juego:
    • Es universal, pudiendo jugar niños de diferentes nacionalidades.
    • Enseña a tolerar la frustración cuando se pierde.
    • Gestionar el éxito cuando se gana.
  • Forja sus habilidades sociales.
  • Aprendiendo a cooperar en el grupo, evitando el individualismo.

• Estimula el aprendizaje, ya que les hace enfrentarse a diferentes situaciones que podrán dominar o adaptarse a ellas.

• Aprenden a la resolución de problemas y a superar obstáculos.

Con cada edad, un juego diferente

El juego siempre tiene que estar adaptado a la edad del niño, haciéndose cada vez más complejo según cumplen años. Hay un paso muy importante a partir de los 2 años ya que con esta edad:

• Los aprendizajes son más elaborados.

• La comunicación es más fluida ya que amplía su vocabulario.

• Tienen un mejor dominio de su cuerpo a nivel motriz:
  • Motricidad gruesa: como andar, subir escaleras, etc.
  • Motricidad fina: como hacer una torre con piezas, dar palmadas, coger un lápiz, etc.

Desde los 0 a los 3 años

Todo movimiento será un juego, aprender a manejar las manos, los dedos, estimulando el desarrollo motor tanto fino como grueso.

En este momento hay que tener cuidado con el tamaño de las piezas o juguetes ya que pueden metérselas en la boca con el consiguiente riesgo de asfixia.

Alrededor de los 3 años          

Aparece la capacidad de la simbolización como, por ejemplo, usar una cuchara para dar de comer a una muñeca, usar un teléfono de juguete como si estuviese hablando con él.

De los 3 a los 6 años 

El juego es una imitación de la vida cotidiana y la forma de relacionarse con el mundo. Juegan a las casitas, a médicos, a bomberos, etc. De esa manera, pueden entender el mundo adulto.

A partir de los 6 años

• El juego puede ser la práctica de algún deporte con sus reglas que les enseñan a seguir unas normas como pasará en la vida real. Aquí aprenderán a perder y ganar, a competir y a cooperar.

• También puede ser leer un libro. Es cuando hay que enseñarles el amor por la lectura.

• Usar las nuevas tecnologías. Pueden ayudarles en el desarrollo a nivel cognitivo-conceptual, estimulando la memoria, la atención, la percepción, el lenguaje; pero siempre bajo el control de padres y madres.

^{Vídeo de "Ventana abierta a la familia" Junta de Andalucía}