¿Para quién es la leche donada?

La leche materna donada se utiliza en recién nacidos prematuros o de bajo peso, pero también en recién nacidos o lactantes con enfermedades digestivas o del sistema inmune, cuyas madres no pueden amamantarlos. Siempre bajo prescripción del Pediatra.

¿Quién puede ser donante?

• Las madres que estén amamantando y cuenten con leche suficiente, siempre y cuando tengan buena salud y hábitos de vida saludables.

• Madres que han sufrido una pérdida perinatal reciente.

• No podrán ser donantes las madres que padezcan ciertas enfermedades infecciosas o crónicas (hepatitis, SIDA…), que tomen determinados medicamentos o productos de parafarmacia, que consuman tóxicos (alcohol, tabaco, drogas…) o que tengan conductas de riesgo para contraer enfermedades de transmisión sexual.

¿Qué hay que hacer para ser donante?

Ponerse en contacto con el Banco de Leche de Extremadura (924 314 686) o manifestar el deseo de ser donante al personal de las Unidades de Neonatología de los hospitales o a la Matrona del Centro de Salud.

A las futuras donantes se les realizará:

• Una entrevista personal para asegurar su buena salud.

• Un análisis de sangre para descartar enfermedades infecciosas transmisibles.

• Firmará el consentimiento informado de su donación.

Todos los datos obtenidos como resultado de este proceso serán tratados de forma absolutamente confidencial.

En esta misma entrevista se informará a la donante del procedimiento a seguir para la extracción de la leche y su conservación. Y se facilitarán los medios necesarios para ello.

¿Qué compromiso se adquiere?

La donante puede dejar de serlo en cualquier momento, ya que no adquiere ningún tipo de compromiso en cuanto a la duración ni a la cantidad de leche a donar.

Únicamente se le pide que informe, al Banco de Sangre de Extremadura, de cualquier cambio en su estado de salud o si comienza a tomar alguna medicación no comunicada en la entrevista inicial.

¿Quién se beneficiará de la leche donada?

La leche materna donada se utiliza sobre todo en recién nacidos prematuros o de bajo peso, pero también en recién nacidos o lactantes con enfermedades digestivas o del sistema inmune, cuyas madres no pueden amamantarlos.

En todo caso, será siempre un Pediatra el que prescriba la leche materna en cada paciente concreto, lo que garantiza en todo momento la idoneidad de su uso.