Estos alimentos son:

• Leche y derivados (yogur, queso y otros lácteos). Debe tomar al menos medio litro de leche o productos lácteos en su lugar (queso, yogur, flan, natillas), sin abusar de ellos. Un vaso de leche equivale aproximadamente a dos yogures.

• Cereales (pan, pastas alimenticias, arroz, galletas sencillas…) que son mejores integrales por su alto contenido en fibra; legumbres y féculas (patatas) en mayor o menor cantidad dependiendo de:
  • el apetito
  • el mayor o menor riesgo de obesidad.

• Verduras y ensaladas, como ingrediente de los primeros platos o acompañamiento de los segundos.

• 2 ó 3 piezas de fruta fresca No se debe sustituir por yogur de frutas o zumos embotellados.

• Carnes, pescados y huevos. Dos tomas moderadas al día son suficientes para aportar al organismo de los niños la cantidad de proteínas que necesitan. Su consumo debe ser moderado, eligiendo mejor el pescado y las carnes de aves que las carnes rojas.

• Aceite de oliva para cocinar y aliños.

• Usar poca sal y mejor yodada.