VIOLENCIA DE GÉNERO

La violencia de género es un grave problema de salud pública debido a su alta prevalencia y las serias consecuencias para la salud de las víctimas. La OMS la declaró una prioridad internacional en 1998. El sistema sanitario, especialmente la atención primaria, es a menudo el primer punto de contacto para las víctimas. Es crucial que los profesionales de salud estén sensibilizados y formados para detectar y abordar este problema de manera efectiva. Además, se necesita un instrumento operativo que defina claramente las líneas de actuación para asegurar intervenciones homogéneas y efectivas en el Servicio Extremeño de Salud.