Francisco Javier Fernández Perianes anunció ayer en rueda de prensa su dimisión como consejero de Salud y Política Social. Fernández Perianes explicó que presentó su dimisión irrevocable ante el presidente del Gobierno de Extremadura, Jose Antonio Monago, que la aceptó, durante la tarde del pasado martes.
Perianes tomó esta decisión tras las informaciones aparecidas sobre su actividad en una consulta privada de oftalmología, en las que se hacía alusión a la incompatibilidad que existía entre su cargo como consejero y dicha actividad.
“En estos momentos cruciales para el futuro de Extremadura y de España, en los que hay que llevar a cabo actuaciones que son inaplazables en la construcción de un nuevo modelo sanitario que sea sostenible y financiable, la mera duda sobre mi persona o sobre mi capacidad me obliga moralmente a esta decisión de ejemplaridad pública”, manifestó.
Fernández Perianes recalcó que no desea que la más mínima duda ponga en entredicho el trabajo que desarrolla el Gobierno de Extremadura, y, en este caso, la Consejería de Salud y Política Social, y señaló que no ha obtenido retribución alguna por la labor asistencial “que haya podido realizar puntualmente durante este tiempo”, fruto de su vocación como médico.
El hasta ayer consejero resaltó en su intervención que ha presentado su dimisión “con la conciencia muy tranquila” sobre sus actuaciones al frente de la Consejería de Salud y Política Social, a la que ha dedicado todo su esfuerzo en los tres meses en que ha estado en el cargo, y agradeció la confianza depositada en él por el presidente Monago y el apoyo de todo su equipo.