Jesús Gallo Elorza durante su infancia pasó muchas horas con su tío, un reputado Cirujano Maxilofacial del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla (Santander), que también ejercía como profesor de anatomía en la facultad de Medicina. Eso despierta en él un gran interés por el conocimiento del cuerpo humano.
Más tarde, de adolescente, y tras ejercer como socorrista marítimo, adquirió “cualidades implícitas en la profesión sanitaria” como trabajo en equipo, toma de decisiones, manejo del estrés y, lo que considera más importante “el enfoque humanitario”, desarrollando así un profundo sentido de responsabilidad y empatía hacia el bienestar ajeno.
Todo ello le permitió encontrar su vocación como sanitario, que canalizó con la licenciatura en Medicina y Cirugía de la Universidad de Extremadura (UEx), el Grado de Licenciatura en Medicina y Cirugía de la Universidad de Zaragoza, un Diploma de Estudios Avanzados por el departamento de Terapéutica Médico-quirúrgica de la UEx y dos másteres universitario en Medicina Estética, Regenerativa y Antienvejecimiento y otro en Dirección de Organizaciones Sanitarias y Sociosanitarias, de la Universidad Complutense de Madrid y la UEx respectivamente.
Jesús enmarca su trabajo como gerente de área en “la gestión y la ejecución de todas las directrices establecidas por el Consejo de Dirección de Área y por el Plan de Salud y los planes estratégicos establecidos por el Servicio Extremeño de Salud (SES)”.
Esto se resume en una gestión eficiente de toda la red asistencial, de financiación y de proyectos, “siempre bajo el prisma de los principios básicos en gestión sanitaria: celeridad, economía y flexibilidad”. A esto añade la accesibilidad, equidad y sostenibilidad del sistema, “garantizando en todo momento la asistencia sanitaria de todos los extremeños”.
Cuando le toca poner en valor su área, ensalza la calidad humana de los profesionales, especialmente en momentos tan complicados como la actual crisis de profesionales de todas las especialidades, “pero sobre todo en Atención Primaria”. Destaca, así, la capacidad de reinventarse ante las dificultades a las que estos profesionales se enfrentan en su día a día.
Gallo admira la actitud proactiva que mantienen ante la falta de recursos humanos, y a veces materiales, que no les menoscaban a la hora de afrontar tanto la asistencia puramente clínica, como el fomento de la promoción y prevención de la enfermedad y los nuevos retos en la Atención Comunitaria.
Jesús también habla con orgullo de aquellos profesionales que no solo abordan las necesidades asistenciales de su área, sino que se mantienen colaboradores con otras áreas de salud “que pueden estar más mermadas en profesionales” para conseguir una buena calidad asistencial en toda la región.
Sobre los retos profesionales, Gallo afirma que el mayor actualmente es “poder contribuir con mi esfuerzo a mejorar la sanidad pública”. La experiencia adquirida en tantos años de trabajo asistencial en el SES le ayuda, ahora como gerente, a identificar las áreas críticas de intervención que requieren atención y estrategias efectivas. “En este contexto, la humanización de la medicina se erige como un principio fundamental”, afirma.
Jesús tiene claro que para conseguir un grado de atención optimo es necesario “un enfoque más centrado en la atención integral e integrada del paciente mejorando la calidad sanitaria, a través de la calidad de sus servicios y prestaciones, fomentando una relación de confianza entre el profesional y el paciente”.
Otro aspecto clave que destaca de la gestión sanitaria es la planificación estratégica, “necesaria en nuestra gestión”, que permite desarrollar medidas que “garantice unos tiempos mínimos de atención sanitaria y una lista de espera adecuada a las necesidades del área”.
Otro desafío importante para Gallo es poder desarrollar nuevos paradigmas de trabajo en las diferentes categorías profesionales que permitan continuar con una actividad sanitaria excelente, “a pesar del déficit de profesionales médicos”, comenta. Para ello, el gerente de Mérida ve necesario desarrollar programas de formación y retención de profesionales en el área de salud, “proporcionando un entorno laboral confortable para todos los profesionales”.
Jesús continúa trabajado también en mejorar la accesibilidad a los servicios de salud, implementando estrategias que eliminen cualquier tipo de barreras, tanto físicas como psíquicas, idiomáticas o culturales, explica.
Jesús destaca que su compromiso como gerente es aportar sus conocimiento y habilidades para “contribuir a un sistema sanitario más sostenible y humano”, trabajando incansablemente para lograr un “sistema de salud público más eficiente, equitativo”, centrado sobre todo en el paciente y sus familiares, así como en las necesidades de la comunidad, sin olvidar la implementación de las estrategias de Salud Pública.